Llega todos los años. Puntualmente. Desde Serandinas. Es su particular manera de ver la Navidad:
Un manera de sinécdoque es la parte por el todo. El espumillón por la Navidad. Es fácil decorar árboles. Montar belenes. Pero cómo se hace con todo un río. Bajé hasta la orilla. Deposité en la corriente perezosa, en el azogue de sus aguas, un espantoso trozo de espumillón plateado. Lo vi flotar lento. Irse despacio. Me pareció el lomo refulgente de una anguila. Y de pronto, en aquella quietud en la que nada sorprendente podía aventurarse, saltaron sobre la presa de color no menos de media docena de bocas voraces. Las truchas del río se llevaron muy al fondo el rastro luminoso de la Navidad.
X. Serandinas
(Feliz año nuevo a todos. Hasta la vuelta.)
Me uno, ¡Al río con ella!
ResponderEliminarAl río (¡qué frío) y al año (nuevo) sin daño. Un abrazo
ResponderEliminarEl cuento es igual al villancico que dice:
ResponderEliminarBrincan y saltan los peces en el río...
Felices vacaciones
Igualmente.
ResponderEliminarNo te empaches con los turrones ni te atragantes con las uvas.
Te esperamos.
He decidido abrir nuevo blog después de un año completo sin escribir apenas nada valioso y cuantioso. Si deseas pasarte entre mis letras para pasar un rato agradable aquí tienes la dirección, no te arrepentirás: http://ladrondeversos.blogspot.com/
ResponderEliminarAprovecho para felicitarte las navidades y un prospero año nuevo. Cuídate mucho y sé feliz. Qué los reyes magos te traigan mucha creatividad para éste largo año que se avecina. Muakss.
Feliz año Diarios
ResponderEliminar¡Feliz 2008!
ResponderEliminarGracias por sus visitas y comentarios, Koolauleproso. Compartimos, según creo, ciudad e iguales sentimientos ante estos días festivos.
ResponderEliminarUn cordial saludo.
No te quepa duda alguna, FPC, de que el Navia baja oscuro y frío. Sobre los buenos deseos para el año nuevo, no es malo, desde luego, eso de pedir que quedemos tal que así.
ResponderEliminarUn abrazo.
Por fin te has decidido, querida Luna, a confesar que te escondes tras un alias. Te ha podido el sistema. Buen año.
ResponderEliminarNo me he empachado con turrones ni atragantado con uvas. Otro cantar tiene lo bebible. Pero de eso, querido Pau, nada decías. Así que no tengo porque sentirme culpable.
ResponderEliminarFeliz año, amigo.
Pues nada, ladróndeversos, ánimo con la empresa. Nos pasaremos por el sitio. Mientras tanto, le deseo también un buen año.
ResponderEliminarAlexandrós es siempre un placer tenerte por aquí. Y lo sería aún más leer más a menudo nuevas rutas en tu cuaderno.
ResponderEliminarUn abrazo, amigo.
Jorge, me alegra mucho su visita, ya sabe la fidelidad que le tengo a sus Obiter dicta, que me viene de cuando esos deliciosos textos fueron entrega impresa en la edición de Los Cuadernos del Bandolero. Mis mejores deseos también para el año entrante.
ResponderEliminarEstoy seguro que en este nuevo año podremos disfrutar de muchos, muchos post con la marca inconfundible de Rayuela
ResponderEliminarA ver si hay fuerzas y algo de ingenio para ello, Occam. Y que lo veas -y lo leas-. Un abrazo.
ResponderEliminarTodo lleno de lucecitas..hip, perdón..algo debe de estar pasando,hip,..pero no recuerdo qué es...hip, hip...
ResponderEliminarEl Gaitero y yo os deseamos FELIZ AÑOOO
(ay señor, qué monárquico me ha quedado...en fin, salud y suerte para todos)
Pasmada
Pordiosss, con lo del alia, parezco
ResponderEliminaruna bandolera de Sierra Morena.
Feliz comienzo de año.
No sabía, Pasmada, que El Gaitero pegase tan fuerte. Feliz año y gracias por tus visitas.
ResponderEliminarLo tuyo, Luna, es el bandolerismo de nariz roja. Así que no te extrañe si los asaltados se tronchan. Un abrazo.
¿Será posible?
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