Recibo correo de RV. Siempre me alegra saber de él. Me envía noticia de una conferencia de Ricardo Menéndez Salmón. Se dijo en ella a propósito de Céline y de su novela Viaje al fin de la noche: “Céline tiene la virtud de enfrentarnos a nuestra condición animal última en un período europeo de entreguerras especialmente sensible. Esta novela profetiza los horrores del porvenir desde nuestra incapacidad histórica de acumular enseñanzas morales”. RV me confiesa que le ha extrañado que alguien diserte sobre Louis-Ferdinan Céline en estos tiempos que corren de corrección política y que siempre consideró Viaje al fin de la noche como una de las mejores novelas que él haya leído. Apuntado queda.
5 comentarios:
A mí me deslumbró, y hubo momentos en que me cogió las tripas y les hizo unos cuantos nudos.
Abrazos.
De Celine he leído poco. No obstante, recomiendo vivamente su librito Semmelweiss, que he regalado a muchos y que estaba publicado en Alianza (espero que no esté descatalogado).
Es la historia de Ferdinand Semmelweiss, un médico austrohúngaro que comenzó a aplicar, sin saber los fundamentos pero con el sentido de quien conoce bien cuáles son las consecuencias, los fundamentos pasteurianos de desinfección de las heridas quirúrgicas y de simple limpieza general en los hospitales. Salvó así a no pocas parturientas de morir de fiebres puerperales.
Pero lo mejor es que Celine transmite tal pasión por la vida de un congénere que la convierte en pura materia narrativa. Una vez empezada no se puede dejar.
Semmelweiss murió loco, lo que no desdice mucho del enloquecimiento del propio Celine con sus rabiosas posturas políticas. Quizá locura y literatura no estén tan lejos.
Un abrazo.
P.D.: Esperemos que lo de Furber se publique y podamos leerlo con detenimiento.
Después de colgar este post, me fui a la Casa del Libro a buscar la novela. No la compré. Me echaron para atrás, de momento, sus muchas páginas. De haberlo sabido antes, FPC, habría empezado por Semmelweiss. No obstante, espero que con el tiempo todo se ande.
A cambio, he salido de la librería con Auden, Oz y Juan Carlos Gea.
Respecto a Furber, espero que alguien se acuerde de él por estos lares y lo publique contándonos más sobre su vida y su obra. Lo cierto es que no he podido econtrar noticias suyas en google.
Un abrazo para ambos.
¿Céline? Ay, es un desfiladero...
"Viaje al fin de la noche" es uno de esos libros de los que Kafka dice "que hagan en nosotros el efecto de una desgracia, que nos duelan profundamente como la muerte de una persona amada, como si fuésemos arrojados a los bosques, lejos de los hombres, como un suicidio; un libro tiene que se un hacha para el mar helado que llevamos dentro."
Bueno, más o menos.
Me permito dejar la huella de una reseña sobre Celine;
http://camabarca.blogspot.com/2006/12/figuraos-la-centrifugacin-de-los-odios.html#links
Mabalot, acabo de leer tu reseña. Como todo en tu bitácora, se taladra en la pantalla. No puedo leerte -y a fe que lo hago a menudo-, sino con una especie de ritmo apresurado. A eso, supongo, se le llama estilo. Y es difícil de conseguir. Me has afilado aún más los dientes. Prometo leer a Céline.
Un abrazo.
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