Arnao
Desde
la bocamina se sale a la playa. Relumbra el mediodía. El cielo es intensamente
azul. Se tarda unos instantes en acostumbrar el ojo a la luz. Una mujer se
broncea en el espigón. Sobre la línea del horizonte un crucero aguarda la entrada
al puerto. Hubo en este rincón de costa un yacimiento de carbón y un pequeño
muelle de carga con gabarras y barcos de vapor. La mina hoy es un museo y por
el dique y la playa se pasean los bañistas. Donde se levantó un esforzado
paisaje en sepia, encuadro ahora el despreocupado color de un verano al sol.
No hay comentarios:
Publicar un comentario